Advierten sobre irregularidades en la Clínica Santa Clara

Sin dudas una deuda histórica de parte de todo el arco político local y también provincial corresponde a lo que sucede con la obra social Pami y particularmente con la atención clínica que esta ofrece en el distrito. Lo primero que debemos mencionar es que la ciudad cuenta únicamente con una sola clínica privada para que los jubilados y jubiladas puedan atenderse. Un solo sanatorio para un poco más de quince mil afiliados (sin contar los adultos mayores que son derivados de otros distritos cercanos).

Silvana Cardoso, que habitualmente escribe para este medio sobre temas que hacen a los derechos y problemáticas que padecen los niñxs y adolescentes, esta vez nos pone en conocimiento sobre uno de de los momentos mas difíciles que le toca atravesar en su vida. Es que nuestra columnista tiene a sus dos padres internados en la Clínica Santa Clara tras ser diagnosticados con Covid-19 sospechoso debido a los síntomas que presentaron durante la semana pasada, los cuales generaron la derivación de la obra social Pami hacia el sanatorio privado.

"Mis padres fueron internados los días miércoles y jueves respectivamente como sospechosos de Covid-19 en la Clínica Santa Clara. A partir de allí vivimos con mi familia una odisea de reclamos porque luego de algunas horas de internación ya vimos que hubo falencias", remarca Silvana, y agrega: "uno de los primeros errores que observamos fue que mi papá al recibir el hisopado negativo fue trasladado a sala común con la desinteligencia de que no nos avisaron como familia, me llamó a las cinco de la mañana desesperado pidiendo por favor que lo saque de ahí, que se ahogaba y que a pesar de pedir asistencia a la enfermera por falta de oxígeno, nadie lo asistió". Esa misma noche, ante los reiterados pedidos del paciente, una enfermera "le dijo a mi papá que si no hacía lo que ella quería lo iba a mandar a terapia para saber lo que era bueno". Esta amenaza ocurrió en el sector de guardia en donde se encontraba internado el hombre de 70 años.

No solamente se produjo esta agresión verbal de parte de una enfermera, sino que el personal médico paso por alto otras cuestiones: "Al momento de uno de los informes diarios me entero de que había una serie de estudios que son de rutina en terapia y que no se le habían realizado. Otra vez me tuve que acercar a reclamar, porque no entiendo nada de medicina. Por fortuna nos acompaña una médica de la familia y gracias a ella y a sus orientaciones nosotros vamos escuchando y afinando el oído", sostiene Silvana.

Consultada sobre si ya inició los reclamos pertinentes a Pami, la entrevistada respondió que "hice el reclamo pertinente en Pami Central y también con los responsables de la clínica. Dejé todo por escrito para que los directivos puedan tomar las acciones correspondientes. Igualmente llega a un punto en que Pami no responde. Con esta situación pedí por favor la derivación porque perdí la confianza con el instituto, pero a esta altura he perdido las esperanzas de que esto pueda ocurrir".

Tras los reclamos realizados, Silvana recibió el llamado del Dr. Sforza quien "me dijo que a partir de ahora él iba a estar a cargo del cuadro de mi papá y que él iba a ser el encargado de darme los informes". Imaginate lo que es para nosotros como familia vivir una situación que ya de por sí es complicada por el virus, tener que estar reclamando a la clínica por algo que se supone que tiene que estar dado".

La intención de Silvana y su familia es que "se haga visible una situación perversa en donde a los viejos los tienen de rehén en una institución. Como familiar no puedo elegir otra institución porque de hecho está claro, pido la derivación y nadie me responde. Me dicen que ellos tienen todos los medios para tratar a mi papá y que no es pertinente. Por ejemplo en el sistema educativo un papá tiene el derecho de elegir la escuela para su hijo, ¿cómo puede ser que yo viendo estas situaciones que son anómalas no puedo elegir otro servicio de salud para mi papá?". Por otro lado aclara que "es importante decir que no todo el personal de la clínica se maneja mal, hay enfermeras excelentes y super cariñosas con mis padres, que realmente los sostienen emocionalmente. Sería injusto generalizar".

Silvana explicó a CLV que "en vez de estar tranquila, tengo que estar alerta, estresada, por ver que nuevo reclamo me toca hacer en el día de mañana. Por otro lado también veo, y me parece que es importante a tener en cuenta, que acá en Zárate nosotros tenemos coordinadores de Pami que se supone que tienen que dar trámite y cuenta de los servicios que presta la obra social. Me han palmeado la espalda y no me han resuelto nada. Fuera del episodio de la enfermera que me prometieron hablar no han gestionado otra cosa. Se que no soy la excepción, tampoco pido milagros, se que estamos ante un virus letal que los médicos están conociendo. Solamente pido que se ocupen de mis padres. Todos vamos a llegar a viejo y vamos a necesitar de Pami, es hora de que las cosas cambien".