Ultimas instancias previas al juicio por el femicidio de Stella Maris Ramírez

En las próximas semanas, el Tribunal Oral en lo Criminal Nro. 1 de Campana definirá la fecha en la que se llevará a cabo la audiencia preliminar, para designar el día en que comenzará el juicio por el femicidio de Stella Maris Ramírez.

La joven convivía con su pareja, Carlos Entivero, en una vivienda del barrio Granja 8 de la localidad de Lima y tenían una niña de 5 años. El 2 de agosto del 2019, los vecinos de la cuadra escucharon gritos, una fuerte discusión y un golpe. Seco, estremecedor.

Desde ese día, nadie supo más nada sobre Stella Maris. La primer coartada de Entivero, 11 años mayor que ella, fue que la joven lo había abandonado. Durante los allanamientos que se llevaron a cabo en la vivienda para tratar de obtener mayores datos, quien hoy es el principal imputado en la causa, sostuvo incólume su versión. Pero el fiscal de instrucción de la UFI 7, Alberto Gutierres, no le creyó.

Ese mismo día, los peritos que trabajaron en la vivienda de la pareja encontraron elementos determinantes: rastros de sangre en un lavarropas, sobre una pared y hasta en la camioneta de Entivero. A simple vista las manchas no eran visibles y fue necesaria una prueba con Luminol para que las paredes comenzaran a decir, lo que el sospechoso no decía.

Días antes del operativo ordenado por la fiscalía, los vecinos vieron a la pareja de Stella Maris y a otra mujer en la vivienda. Ambos dedicaron gran parte del día a limpiar todos los ambientes de la propiedad con lavandina, y también hicieron un fuego donde incineraron varias cosas. Esa mujer, era Amelia Itatí Lezcano, de 54 años, y es la segunda imputada por el femicidio de su nuera.

Madre e hijo fueron detenidos. La madre en San Roque, provincia de Corrientes. Ciudad que había dejado tras ser convocada por su hijo. La hipótesis que sigue la fiscalía, es que Lezcano colaboró con su hijo Carlos para tratar de ocultar el crimen, luego tomó a su nieta y fue trasladada por Entivero otra vez hasta Corrientes.

En su declaración testimonial, días más tarde, diría ante el fiscal que ella arribó a la vivienda de Granja 8 con posterioridad a la desaparición de Stella Maris, que no vio a la joven y que vino con el objeto de cuidar a su nieta. Su hijo, en la misma instancia, insistiría con la versión del abandono de hogar.

Aquellos fueron días turbulentos en Lima. El caso de Stella Maris reveló una profunda ineficacia policial en la localidad, que terminó con la decisión del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires de relevar al comisario Walter Villa, a cargo de la Comisaría 2da, luego de un clamor popular convocado en las puertas de la sede policial, donde se vio al comisario totalmente desprovisto de respuestas para las demandas de los vecinos. La decisión se concretó el 23 de agosto; dos días antes, Stella Maris era encontrada por un grupo de pescadores en el Km 130 del Río Paraná.

Cuatro baqueanos que recorrían la zona del bajo delta del Paraná notaron que algo no estaba bien cuando divisaron un bulto flotando entre unos juncos. Al aproximarse con su embarcación, pudieron ver con más claridad que se trataba del cuerpo de una mujer, decapitada y con lesiones en la zona abdominal. Las pericias posteriores pudieron determinar que ese cuerpo saponificado, posiblemente arrojado varios metros río arriba, era el de Stella Maris. 

El pasado 18 de noviembre, la Fiscalía General del Departamento Judicial Zárate Campana realizó el ofrecimiento de prueba, que consiste en la presentación ante el Tribunal de los elementos probatorios recabados que serán utilizados durante el debate en las audiencias del juicio. Esto es: documental, placas fotográficas, informes, testigos y peritos. Precisamente, y aunque luego no sean todos convocados a la audiencia, Corré La Voz pudo saber que son 55 los testigos incorporados, a lo que se suman otros 23 peritos.

El TOC 1 se encuentra compuesto por los jueces Dr. Guillermo Guehennuef, Dr. Javier Romañuk y el Dr. Facundo Puente; el Fiscal de Juicio será el Dr. Alejandro Irigoyen y se estima que el Ministerio Público Fiscal pedira la pena de prisión perpetua para los imputados.

Entivero y Lezcano comparten abogado defensor, el Dr. Marcelo Costa. Al menos lo comparten por el momento, pues, si bien ambos se encuentran imputados por el mismo delito de “homicidio doblemente agravado por tratarse la víctima una persona con quien el autor mantenía una relación de pareja conviviente y por ser cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género”, es posible que la versión de cada uno de ellos tome rumbos distintos y se manifiesten intereses contrapuestos. En tal caso, Costa no podría defender a ambos.

Se espera que en el transcurso de los próximos 10 días concluya esta etapa de prueba y el Tribunal fije la fecha de audiencia. Dada la complejidad del caso, altas fuentes consultadas deslizaron que el debate podría iniciarse recién el año que viene, aunque vieron con buenos ojos que, a pesar de las dificultades que trajo la pandemia para el sistema judicial, los procesos del caso tuvieron un desarrollo relativamente ágil.