La sexualidad ¿Es cosa de chicxs?

/ Por Dra. Romina Barraza

Sabemos que somos seres sexuales desde que nacemos; entonces, debemos educar en sexualidad desde ese mismo momento. Sin dudas cuesta imaginar la situación en la que uno habla con un bebe… pero no nos olvidemos que no sólo educamos con las palabras… también lo hacemos con las acciones y es asi como debemos empezar a hacerlo.

La sexualidad no se trata únicamente de genitales y relaciones sexuales. Se trata si, de la reproducción, pero también de los vínculos afectivos y el género. En esta etapa no hay noción del erotismo, entonces eso lo dejaremos para cuando estén llegando a la pubertad.

¿Cómo le enseñamos a un bebe o niñx pequeñx sobre los vínculos? Eso es un trabajo permanente y muchas veces lo realizamos sin darnos cuenta. Mucho de lo que decodifican los bebes es a través del tacto. Las caricias, los masajes, las cosquillas, hacer upa, amamantar, el momento del baño, son todas acciones que tienen que ver con la sexualidad. A través del tacto, el niñx aprende a conocersu cuerpo, reconocer sus límites, sus partes, qué cosas le gustan y le resultan placenteras y qué cosas no. 

Es muy importante en esta etapa la decodificación del adulto a las necesidades del menor… Poder satisfacer correctamente sus necesidades hará que se sienta valorado, contenido y a futuro formará una buena autoestima, podrá crear vínculos saludables.

A medida que van creciendo, es a través del juego y los juguetes donde tendremos la puerta de entrada… Es muy importante en el correcto desarrollo de su sexualidad no condicionar sus deseos a los estereotipos de género que la sociedad impone. A través del juego, el niñx es capas de acceder a la “realidad” que desee, puede ser un/a astronauta, chef, pájaro, bomberx, padre, madre, deportista, cazador de dinosaurios… lo que quiera! ¿Entonces… por qué no le permitiríamos a un nene jugar con muñecas o a una niña jugar con autitos si sabemos que sólo están jugando? ¿En qué creemos que se los va a perjudicar si juegan a algo que rompe con los estereotipos sociales? Aquí el trabajo fuerte lo tenemos que hacer lxs adultxs, para romper con los prejuicios erróneos con los que fuimos criados.

Otra oportunidad fantástica para educar en sexualidad es a través de los cuentos: la autogestón de las emociones los ayudará a fortalecer la autoestima, la confianza en si mismos y en los adultos cercanos, la autonomía, el respeto a los demás, el cuidado del cuerpo (propio y del otro).

Les dejo aquí algunos títulos fantásticos para leerles:

La calma de León (de Victoria Conte): Manejo de las emociones

El desafío de León (de Victoria Conte): Autonomía, autoconfianza, superación de obstáculos, valoración de la familia.

Te quiero, siempre (de Belén Lopez Medus y M. Casabal): Afectividad, autoestima, vínculos afectivos, familia.

El día que mamá se transformó en un dragón (de BelenLopez Medus): Gestión de emociones (niños y adultos), respeto, familia, reconocer errores, pedir perdón, perdonar

Rojo. Historia de una cera de colores (de Michael Hall): Estereotipos, autoestima, perseverancia, diversidad

El sólo hecho de compartir un momento de lectura con nuestros peques, ya genera un vínculo que fortalece cualquier lazo.

Palabras claves para enseñar a esta edad son: Respeto, autonomía, autoestima, diversidad de familias, partes del cuerpo (nombrarlas, higiene y cuidados), intimidad, lo público y lo privado.

Todo esto es parte de la educación sexual, y las casas son un lugar privilegiado para llevarla adelante.

Si necesitas más opciones y sugerencias, no dudes en consultarme.

Dra. Romina Barraza

Médica Sexóloga y Educadora en Sexualidad Humana. MN 154156

Facebook: Sexualidades | Instagram: drabarrazasexualidades

Consultas y turnos: 03489-15510250