Dermatitis atópica: ¿De qué se trata?

/Por Dra. Renata Oborski

La dermatitis atópica (DA) es una enfermedad cutánea crónica, inflamatoria, no contagiosa, recurrente y pruriginosa. Afecta frecuentemente a niños, aunque también puede presentarse en la adultez.

Con frecuencia se asocia a niveles elevados de inmunoglobulina E (IgE), historia familiar o personal de otras afecciones alérgicas como asma, rinitis, o alergia alimentaria. Sin embargo, existen formas de DA sin estas comorbilidades y/o con IgE en rangos normales, en las cuales no debe excluirse el diagnóstico por la ausencia de sensibilización alergénica evidente.

Se caracteriza clinicamente por la presencia de xerosis (piel seca), eccemas y prurito ( picazón). Las áreas de la piel afectadas y la morfología de las lesiones, van a depender de la edad del paciente.

La DA generalmente comienza en la infancia y puede afectar hasta al 15 % de los niños; sin embargo, en muchos casos persiste en la adultez, con una prevalencia del 7-10 %. La DA en el adulto es a veces difícil de diagnosticar. Existen varios diagnósticos diferenciales. Puede presentarse en ambos sexos, aunque es más frecuente en mujeres jóvenes.

Es una enfermedad que al ser crónica se presenta con brotes y remisiones en los pacientes que la padecen y, aún sin tener mortalidad, los afecta marcadamente. Los pacientes con DA tienen además de prurito y dolor en las lesiones, alteración en su calidad de vida, complicaciones en la esfera social, escolar o laboral cuando la afectación es severa.

Además de aumentar el riesgo de infecciones, el riesgo de comorbilidades alérgicas y de salud mental es significativo.

El diagnóstico se basa en los antecedentes y criterios clínicos.

Los tramientos van a depender fundamentalmente de la gravedad de las lesiones y deben siempre ser personalizados e indicados por un dermatólogo.

Las medidas generales de cuidado de la piel en todos los pacientes, son fundamentales: los baños cortos (no más de 10 minutos) con agua tibia, usar un jabon cremoso o syndet (synthetic detergent), secar con una toalla suave y humectar con una buena crema sin perfume toda la superficie de la piel es de suma importancia.

Muchos estudios han permitido poner en evidencia la importancia de la DA, comprender su naturaleza pluridimensional, su implicancia como enfermedad sistémica y sus aspectos socioeconómicos. En la medida que se disponga de nuevas opciones terapéuticas, la comprensión de los múltiples y diversos aspectos de la DA nos ayudarán a emplear mejor estos avances, en un marco de medicina de precisión, y diseñar estrategias optimizadas de prevención y tratamiento que sean no solamente eficaces para aliviar a los pacientes, sino también costo-efectivas para el sistema de salud donde nos insertamos.

Dra María Renata Oborski

Medica Especialista en Medicina Interna y Dermatología

MN: 123.601 MP: 450.635

reoborski@hotmail.com

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